El equipo

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A veces...

Lo más divertido de la vida es el no saber el qué te deparará el futuro, ¿verdad? ~Eria Jumps

(Esta historia es ficticia, o al menos según Junie; Eria aún se opone completamente a esta idea...)

Golden Podium es un proyecto tanto escrito como dibujado que lleva en pie desde 2012. Tenemos una novela, dibujos, tiras... ¡y hasta un Motion Book! #goldenpodiumcomic

22 sept 2021

120. Otra broma pesada

Capítulo 120

Paseé la vista por los alrededores dando toques con la botella en la valla. Nada interesante... Salvo una especie de máquina que vi a unos metros de mí. De lejos parecía una boca de incendios, pero después de fijarme de nuevo vi que parecía una dispensadora.
Dos chicas que parecían de mi edad se acercaron y me taparon su vista. Traté de asomarme por un lado, pero fue inútil; me estorbaban. No iba a conseguirlo, así que volví a mirar hacia la carretera.
De pronto comencé a sentirme observada: otra vez las dos chicas. Seguro que se habían pensado que me estaba fijando en ellas: vi por el rabillo cómo me señalaban con una risita.
-¿Puedo ayudarlas en algo, señoritas? -apoyé el codo en la valla y crucé las piernas con aire pasota. Mia se giró.
En cuanto me miraron a la cara, cambiaron un poco el gesto. Seguramente me habrían confundido con un niño de un par de años menos; no era la primera vez que me pasaba. Lo mismo me tomaban por un mirón.
-En nada, gracias -una de ellas hizo un gesto con la mano. Algo en ellas no me gustaba,-. ¿Así que Golden Podium?
-Sí -bajé la vista hacia la chapa que llevaba en el pecho. La otra comenzó a reírse-. ¿Algún problema?
-Nada, nada. Es por un par de cosas que hemos oído sobre vosotros, como lo de que os gusta saltaros las normas y ser desorganizados. Esperemos que esta maratón no sea tan desastrosa como los rumores que se dicen por ahí.
Ja, ja, me partía. A saber cuál sería la suya: llevaban la misma estúpida chaqueta.
Cómo no, Mia me leyó el pensamiento y dijo el nombre por lo bajo.
-¿Y a vosotras cómo os va en Satelis? -sonreí ampliamente-. ¿Se puede vivir allí o sois tan creídos que es imposible aguantaros porque no sabéis pasarlo bien sin criticar?
Me miraron con asco y se apartaron, dispuestas a irse.
-¡Esperad! Creía que nos estábamos llevando bien. ¿También es costumbre dejar plantada a la gente en vuestra academia? ¡Podemos salir a tomar algo!
Mia empezó a reírse. Vaya, sabía que en otras academias las cosas funcionaban distinto, pero de ahí a que hubiera gente tan rancia suelta...
Volví a mirar a la máquina. con un poco de suerte podría adivinar para qué servía... Oh, no.
Alguien más estaba delante, y esta vez era mucho peor. Tenía el pelo muy rubio, con la parte de atrás algo peinada hacia arriba, vestía como un niño bueno sin serlo y lo acompañaba una chica gótica con mechas moradas: era Ridley Left. Cómo no, Mystery estaba a su lado.
-¿No hace buen día, Jumps? -se volvió a mí. En la mano, por algún motivo, llevaba un globo de agua que hacía bailar en su palma.
-Lo hacía -escupí, conectando el auricular-. Ridley, ¿qué se supone que haces con eso?
-Me lo ha dado la máquina -se encogió de hombros-. Es totalmente legal. ¿No lo sabías? Parece ser que eres la única.
-Eri, es verdad -susurró Mia-. Puede lanzarlo.
¡¿Podía?!
-Eria, han puesto puntos con obstáculos a lo largo del recorrido. ¿Lo recuerdas? -me habló Mirta a través del auricular-. ¡No puedes dejar que Ridley le acierte a Jetwick!
-¿Y quién narices ha permitido esto? -farfullé.
-¿No lo conoces? -Ridley sonrió de lado-. Vaya... creía que había algo especial entre tú y el director Morrison, pero parece ser que sólo era un triste rumor.
¡¿Morrison?! Sería verdad. Tenía todo el sentido que la idea hubiese salido de él, ¿pero a QUIÉN se le ocurre gastarle bromas a los corredores?
-Como te atrevas juro que te mato.
-Ya estás tardando -miró a Mystery y ella asintió-. Pero te lo advierto: lo mismo hago que te arrepientas de lo que estás a punto de hacer.
Y, justo cuando eché la vista atrás, apareció Jetwick.